Rito de la Pipa Sagrada “Calumet”
Esta ceremonia se lleva a cabo en ciertos momentos cruciales como el nacimiento, el matrimonio, acuerdos importantes, etapas de cambio, ceremonias de purificación, meditaciones de la luna o para cualquier persona que tenga necesidad de orar o de dar gracias.
En el mundo indígena, la ceremonia de la pipa es parte de una forma de vida que viene del corazón. Para ellos es una medicina, una forma de orar y de hablar con la verdad y sanar relaciones o malos entendidos.
Al llenar la pipa, todo el espacio y Universo (representado por las ofrendas a las siete direcciones) y todos los dones de la Madre Tierra (representado por el tabaco) están contenidas dentro de un solo punto (el cuenco o corazón de la pipa), a fin de que contenga y sea el Universo. Y si la pipa es el Universo también lo es el humano, quien la llena y quien la comparte. Con ello deben identificarse, así dejamos de ser un fragmento y nos volvemos enteros y sagrados, rompiendo la ilusión de separación.
La enseñanza de la pipa nos ayuda a estar en paz en muchos ámbitos. Vivir en paz forma parte de la salud del ser humano y de las personas que aspiran a una vida más espiritual. Si empezamos por la paz interna, según los nativos, ésta se encuentra a través de la oración y del encuentro con nuestra misión en la vida.
Es importante estar en paz con los demás y resolver cualquier conflicto interno que nos debilite y no nos permita dar a luz nuestro propio potencial.
Meditación ante el fuego y Vigilia
Para oír la voz de la sabiduría hemos de empezar por estabilizar nuestra mente, el desarrollo de la estabilidad se conoce con el nombre de Vigilia. Se despierta a medida que observamos los fuegos danzantes durante un periodo de tiempo determinado.
El fuego es un pórtico que conduce a la sabiduría. Mediante la observación podemos ver con mayor claridad aquellas pautas de pensamiento que obstaculizan nuestras relaciones. “Por todas mis relaciones” decimos al entrar en un ceremonial sagrado. Nuestra primera relación es con nosotros mismos y después con todo lo demás sea material o inmaterial. Si queremos curar al planeta el primer paso consiste en acercarte a la belleza que existe en ti (observa la belleza en tu propio corazón, perdona tus ideas y corrige los pensamientos que oscurecen en tu mente la luz del verdadero fuego de la sabiduría). ¿Cómo? Siéntate y observa. ¿Cómo dejamos de lado la idea de oscuridad y duda? Dando gracias, demos gracias por todo cuanto existe, por la abundancia que nos envuelve y a la que estamos o no abiertos.
Crecimiento en grupo
Tomar contacto y actualizar el propio potencial humano es crecer en el contacto con el “ser”. Nuestra verdad, nuestra autenticidad, a lo largo de las horas compartidas, se va presentando. Desde ella tratamos de manifestarla, de comunicarla, dándonos cuenta de que hay resistencias, de que hay temores, surgidos a lo largo de nuestra historia personal que camuflan diversas heridas. El cómo nos protegemos constituye el carácter y, bajo él, palpita nuestra genuina personalidad. Unidos por el influjo de la Sagrada Rueda Medicinal, comprometidos con el intento de abrirnos por la purificación y la aspiración de la íntima libertad, inspiración y visión; nos vamos a apoyar y entregarnos en la confianza de que manifestar nuestra autenticidad y compartirla es un goce.
Aceptemos el desafío de las reticencias, de las inseguridades y las desconfianzas que la vida nos ha condicionado y apoyándonos en grupo seamos triunfadores de la libertad.
El Alba nos pone en contacto con nuestro despertar energético. Del mismo modo que el poder del Sol a partir del equinoccio vernal insufla energía que permite el despertar de la vida, la salida del sol aporta energía que podemos absorber de acuerdo con prácticas ancestrales.
Rito el "Árbol de la Visión"
El árbol representa el puente de contacto entre la Madre Tierra y el Padre Cielo. Símbolo del ascenso de la vida y de la consciencia desde lo material a lo trascendente. El árbol crece durante siglos y aún milenios hundiendo sus raíces en la fecunda Tierra y abraza el Cielo fundiéndose con él.
Durante el rito nos dividiremos en ayudates y danzantes. Los danzantes, con el apoyo de los ayudantes y sus ritmos, se ineriorizan meditativamente adentrándose en un cierto trance, abriéndose a experimentar la inspiración, la iluminación y la visión. Después se cambia los papeles. Una vez obtenidas las inspiraciones y visiones se produce la segunda parte que consiste en una auténtica celebración fusional del propio ser, con el sagrado árbol y todas las relaciones. La actitud experiencial es la de exteriorizar y compartir con los demás y con el Universo lo experimetado en la fase anterior.
Recomendaciones: para los trabajos ceremoniales es conveniente traer ropa de color claro (blanco, azul cielo, beige...) mostrando una disposición e intención de impecabilidad. En el Temazcal es adecuada una ropa cómoda, ligera que permita transpirar. Camiseta de algodón o lino con pantalón corto o falda es adecuado. Traer una estera o toalla para trabajar sobre la tierra y una manta para cubrirse. Si tenéis maracas o tambores podéis traerlos.